Soga cruel, cubo como podio,
tras los cristales lluvia de mayo adormecido,
lluvia de penitencia tras la piel de tu pecho:
miseria en los zapatos que nos tienen, mendigo.
Mendigo, amigo de las nubes, del viento huidizo,
del frío banco de tus noches deshabitadas,
de la vida demente, puta y equivocada,
de los golpes errados en tu cuerpo castigado.
mendigo, tú ya no eres, ya no estás, no imaginas,
no culminas, no gozas, no sufres, no padeces,
no expresas, no despides, no saludas, no faltas.
no recuerdas, no olvidas, no aventuras, no sueñas,
no peligras, no dueles, no socorres, no bailas:
mendigo, tú ya no amas, ya no vives, no mueres.
Un saludo, katy.
martes, 17 de abril de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario